Es una auténtica delicia despertarse en el corazón de los fiordos. Con apenas cuatrocientos habitantes, Flåm es una visita obligada para todos aquellos que desean conocer uno de los fiordos más populares de Noruega, el Sognefjord.
Cada verano las calles de Flåm se llenan de turistas de todo el mundo. Algunos llegan en tren, los más, en los numerosos cruceros que atracan en su puerto. Lo que es común a todos ellos es las ganas de conocer y disfrutar los espectaculares vistas que el pueblo regala a sus visitantes.
Por la mañana, algunos de nuestros viajeros deambularon por los numerosos cafés y puestos de comida disfrutando de un gran ambiente internacional. Unos pocos se atrevieron a subir hasta un mirador natural desde el que se disfrutaba de una espectacular vista de Flåm. Allí capturamos una de las imágenes más bellas de nuestro viaje.
Después de almorzar, nos embarcamos en el crucero por el Sognefjord rumbo a Bergen. Durante las más de cinco horas de trayectos, tuvimos tiempo de apreciar la belleza del fiordo más largo y profundo de Noruega. Con sus más de 204 km de longitud, es el seguro fiordo más largo del mundo. Navegar entre sus aguas sintiendo el rugido de sus imponentes cascadas, es un verdadero deleite para los sentidos. Instantes de sublime belleza que nos quedarán para siempre grabados en la memoria…
A eso de las 20:30 llegamos A Bergen embriagados por la hermosura del Sognefjord. Desde el puerto nos desplamos hasta nuestro nuevo hospedaje con la intención descansar tras una larga jornada. Nos esperaba una antigua casa de madera de 1750 llena de encanto. Un lugar muy especial donde relajarnos, tomar aire, y recordar los momentos vividos. El siguiente día nos llevará a descubrir Bergen.